Las
parejas que mantienen una relación cíclica pueden ser mucho más
impulsivas a la hora de tomar decisiones importantes en la relación,
como irse a vivir juntos, o incluso tener un hijo.
Amber Vennum afirma que “tienden a estar menos satisfechas con su
pareja, tienen mala comunicación y toman más decisiones que afectan
negativamente la relación, tienen baja autoestima y sienten
mayor incertidumbre sobre el futuro de la relación”.
También se comprobó lo que ocurría si estas relaciones daban el paso y
se casaban, se observo que tendrían problemas e incertidumbres en el
comienzo de su vida juntos, y que la probabilidad de separación seria
mucho más alta que en una pareja constante (que no se ha separado
nunca).
“Si estás en una relación intermitente antes de casarte, esta
situación persiste durante el matrimonio”, la confianza que tienes o
tenias en tu pareja cada vez disminuye mas con lo antecedentes de
rupturas.
Para evitar esta situación, Amber da sus consejos; “Ver a un ex novio
hace que sintamos amor por él. Si no lo ves, los sentimientos poco a
poco disminuyen en intensidad hasta que desaparecen por completo”.
En definitiva el estudio afirma que cuando rompes con tu pareja una
vez, la confianza en esta nunca se vuelve a instaurar tal y como estaba
antes, lo que a la larga te traerá problemas.